Comentario
La situación en Alemania no mejora, aunque se estabilice, y algunos artistas se comprometen cada vez más. Grosz, Karl Witte y John Heartfield, que sigue haciendo fotomontajes políticos cargados de fuerza, fundan en 1924 el Grupo Rojo, Die Rote Fane, una asociación de pintores y dibujantes comunistas, que se presenta en el Manifiesto como "grupo nuclear para una organización cada vez más amplia de todos los artistas revolucionarios proletarios de Alemania". Con el director teatral Erwin Piscator en sus filas, se proponen "intensificar la propaganda comunista mediante la escritura, el cuadro y los escenarios". Pero las posturas más radicales en el campo del realismo se dan en 1928, con la ARBKD, Asociación de Artistas Plásticos Revolucionarios de Alemania, comprometida en hacer un arte decididamente revolucionario, "en oposición a las asociaciones de artistas basadas solamente en las tendencias estilísticas y el arte por el arte. Cercano a las experiencias rusas. El arte es un arma, el artista un combatiente en la lucha de liberación del pueblo".Se suele establecer una división poco clara, entre Nueva Objetividad, identificada con posiciones políticas de izquierda y Realismo Mágico, más centrado en la representación de lo intemporal y situado más a la derecha, que, aun así, acabará con la llegada de los nazis. La calma del Realismo Mágico permite adentrarse en busca del significado esencial de las cosas, acentuar valores permanentes y estables, transmitir serenidad; mientras la representación minuciosa y detallada de la Nueva Objetividad hace posible cargar las tintas en la crítica y en la protesta. Fue Hartlaub el que utilizó el término en 1922, pero su principal difusor fue el crítico Franz Roh, quien, en 1925, lo formuló por escrito en su libro "Nach-Expressionismus" (Postexpresionismo. Realismo mágico). Roh plantea la posibilidad de captar el misterio oculto detrás del mundo representado -de ahí la magia-, pero deja un campo de posibilidades muy abierto en el que hay sitio tanto para la Nueva Objetividad como para el realismo de concepto de Miró en La Masía (1922, Nueva York, col. particular), además de Picasso, Dérain, Carrá, De Chirico, Severini, Schrimpf, Mense, Davringhausen, Kanoldt, Dix, Grosz, Scholz y Ernst. Para Roh el postexpresionismo es un movimiento de carácter europeo, que se opone al expresionismo en formas y contenidos.G. Schrimpf (1889-1938), un autodidacta que visitó Italia en 1920, y A. Kanoldt (1881-1939), que expuso en Berlín en 1927 en la muestra de la Nueva Objetividad, se sitúan en este ámbito, muy cerca de las teorías de la revista italiana "Valori Plastici", que era la abanderada de la vuelta al orden en los años veinte y de Carlo Carrá y la pintura metafísica.